Los Principios de Yogyakarta

Los Principios de Yogyakarta sobre la Aplicación de la Legislación Internacional de Derechos Humanos a las cuestiones de Orientación Sexual e Identidad de Género fueron adoptados en una reunión desarrollada del 6 al 9 de noviembre de 2006 en la ciudad de Yogyakarta, Indonesia, de la que participaron especialistas en legislación. 

Allí se ratificaron los estándares legales sobre cómo los Estados podrían detener la violencia, abuso y discriminación ejercida contra lesbianas, gays, bisexuales, personas trans e intersexuales a fin de asegurar una igualdad plena.

Estos principios son una lista precisa y fundamental que complementa y clarifica el alcance y profundidad de los derechos humanos con la mirada puesta en la orientación sexual y en la identidad de género. Fueron desarrollados en respuesta a los patrones de abuso perpetrados contra millones de personas en todo el mundo debido a su orientación sexual o identidad de género. 

No crean nuevos derechos humanos para las personas LGBTI+, sino que plantean un sendero para fortalecer los sistemas de protección de los derechos humanos de cada país, sobre todo en aquellos en los cuales aún hoy en 2020 continúan legislando para criminalizar las orientaciones sexuales e identidades de género distintas de las hétero–cis normativas.

En Argentina, los Principios de Yogyakarta fueron fundamentales para la conquista de derechos de las personas LGBTI+, entre los que se resaltan los derechos consagrados en las leyes de Matrimonio Igualitario y de Identidad de Género, y en Neuquen Ciudad la recientemente sancionada Ordenanza de Cupo Laboral Trans.