Hito Nº 6 A
Rioja Nº 350
Defensa de la democracia. Semana Santa de 1987. A) Rioja Nº 350. Casa de Gobierno. Gobernador Felipe Sapag.16/4/1987
“Abra las puertas de la Casa de Gobierno para que el pueblo defienda la democracia”
-Gob. Felipe Sapag, Radio LU5-
Semana Santa, 1987. En la mañana de aquel jueves 16 de abril comenzó el alzamiento de un grupo de militares que se denominaron “carapintadas” y que pretendían frenar los juicios contra los represores de la dictadura iniciada en 1976 y dar un golpe de Estado contra el presidente Raúl Alfonsín.
El gobernador de la provincia, don Felipe Sapag, se encontraba de viaje en Buenos Aires. A través de un reportaje radial, ordenó al vicepresidente primero de la Legislatura, a cargo de la Gobernación, que abriera las puertas de la Casa de Gobierno para que el pueblo defendiera la democracia.
En la misma mañana del jueves, las puertas del Salón de Acuerdos de la Casa de Gobierno y las ventanas del despacho del gobernador quedaron abiertas, del mismo modo que las escuelas, comisiones vecinales, gremios y sedes partidarias de la ciudad. Con el pueblo en la calle durante todo el fin de semana, el domingo se produjo la mayor movilización popular de la ciudad para clamar Nunca Más a una dictadura militar. Este hito representa el coraje cívico del pueblo de la ciudad del Neuquén, para defender la democracia y los derechos humanos.
1987
Documento de la multisectorial
El mismo jueves 16 de abril de 1987 por la tarde, en el Salón de Acuerdos de la Casa de Gobierno –mientras afuera en la calle se movilizaban por primera vez en esos días más de cinco mil personas-, representantes de los partidos políticos, gremios, organismos de derechos humanos, iglesias, organizaciones estudiantiles y cámaras empresariales dieron a conocer un documento que decía: “Debemos comprender los argentinos que no está en juego en esta difícil circunstancia el triunfo o el éxito de alguna parcialidad política, o de algún sector social, sino la Argentina solidaria, participativa, democrática, justa y libre que tanto buscamos y anhelamos. La opción es seguramente la vida en democracia o la muerte en el autoritarismo”.
“…ratificamos la clara voluntad del pueblo de asegurar que las leyes de la Nación no desvirtúen la decisión de la Justicia en el juzgamiento y castigo de quienes han cometido delitos de lesa humanidad, rechazando la pretensión de esos sectores de obtener la amnistía…”.
“Que adviertan quienes están contra la soberanía popular que el pueblo argentinos está irrevocablemente decidido a emplear sus únicas y legítimas herramientas de defensa, cuales son: la movilización y la participación más firmes y enérgicas para el sostenimiento del marco de nuestra Constitución Nacional”.
En la Semana Santa de 1987, la democracia argentina se vio amenazada por un alzamiento militar. Un grupo de militares encabezados por el teniente coronel Aldo Rico, conocidos como “carapintadas”, tomaron las instalaciones de la Escuela de Infantería del Ejército, uno de los cuarteles más importantes del país, ubicado en Campo de Mayo, en la provincia de Buenos Aires. Este levantamiento tenía por objetivo frenar los juicios a todos los militares que habían actuado en el terrorismo de Estado durante la dictadura militar que se había iniciado el 24 de marzo de 1976. Por aquel entonces ya habían sido juzgados y condenados los responsables máximos de la represión en el histórico juicio a las juntas militares desarrollado en 1985.
El mismo jueves 16 de abril –inicio de la Semana Santa- el pueblo argentino se movilizó masivamente en las calles y plazas de todo el país en defensa de la democracia y en un claro repudio al levantamiento militar. “Nunca más” fue la frase elegida por el fiscal que juzgó a las juntas militares. También fue el título que dio nombre al informe sobre desaparición de personas elaborado por la Conadep. Ahora el Nunca Más a la dictadura y al horror de las violaciones a los derechos humanos había hecho carne en el pueblo argentino y se expresaba como una realidad en las calles. NUNCA MÁS a una dictadura.
B) CONTEXTO PROVINCIAL
Neuquén se movilizó día y noche
En Neuquén se abrieron las escuelas, las comisiones vecinales, las sedes de los partidos políticos, los sindicatos. Durante todo el día y la noche, el pueblo –en especial los jóvenes- se reunían, intercambiaban información y proponían actividades.
La radio LU5 se convirtió en un punto de referencia y comunicación para toda la comunidad. Además del mensaje del gobernador, fue el canal de expresión de todos y, a la vez, la herramienta de información de hechos y actividades que se generaban minuto a minuto tanto en Neuquén como en el resto del país y en especial en Buenos Aires. Fue, en esas circunstancias, el ejemplo cabal de un medio al servicio de su comunidad.
En la noche del viernes, el obispo don Jaime de Nevares invitó al pueblo a participar del vía crucis a la barda neuquina –tradicional en Semana Santa- para recordar el “camino del dolor” de Jesús y a la vez demostrar su vocación por la democracia. Por esta razón, la multitud que se había concentrado desde las 20 en torno de la Legislatura provincial se comenzó a encolumnar en la Avenida Argentina, cerca del Obispado.
Contexto defensa de la democracia
-Semana Santa-
1987
1917-2010
Biografía del gobernador Felipe Sapag
Nació en Zapala el 17 de febrero de 1917 en una familia de inmigrantes libaneses que habían llegado a Neuquén en 1913. Realizó sus estudios secundarios –tenedor de libros- en el colegio secundario de Don Bosco en Bahía Blanca, que tuvo que abandonar debido a la crisis económica de 1930. En 1931 se trasladó a Cutral Co. Allí fue carnicero y propietario junto a su hermano Elías de un negocio de ramos generales. Se casó con Estela Romero, con quien tuvo cuatro hijos: Luis, Silvia, Ricardo y Enrique.
Fue fundador de la cooperativa eléctrica de Cutral Co, del Centro Cultural y Deportivo Cutral Co y de cuanta organización comunitaria se puso en marcha por aquellos tiempos.
En 1951 puso en marcha su carrera política al ser elegido concejal por el Partido Peronista asumiendo en 1952 como intendente. Fue derrocado por el golpe militar de 1955. Con el peronismo proscripto, participó activamente en apoyo de las huelgas del Sindicato Unido Petroleros del Estado (SUPE) en 1958 y en la Unión Ferroviaria en 1961, que tuvieron gran relevancia en nuestra provincia.
En 1963 se realizaron elecciones para gobernador triunfando ampliamente, asumiendo por primera vez como gobernador de la provincia del Neuquén. Durante ese primer gobierno sentó las bases de nuestra provincia: el desarrollo de la educación pública –eliminó las escuelas rancho y fundó la universidad provincial-, la creación del sistema de salud –construcción de hospitales y centros de salud-, la construcción de planes de vivienda, caminos, las primeras industrias provinciales y la defensa del federalismo fueron parte de su legado.
Fue designado gobernador en 1970 y con el retorno de la democracia en 1973 triunfó nuevamente en las elecciones, asumiendo por tercera vez el gobierno de la provincia.
El golpe militar del 24 de marzo de 1976 lo derrotó y le provocó un duro golpe: dos de sus hijos, Ricardo y Enrique, fueron asesinados por la dictadura mientras defendían sus ideales por una sociedad más justa. En 1983 asumió su cuarto mandato como gobernador y en 1995 el último, a los 82 años.
Fue un líder popular con trascendencia nacional; aun después de retirarse de la vida política todos los dirigentes políticos y sociales que llegaban a Neuquén lo visitaban en su casa. En 2008 fue nombrado vecino ilustre de la ciudad de Neuquén por el Concejo Deliberante. Falleció el 14 de marzo de 2010 en esta ciudad a los 93 años, dejando el imborrable recuerdo de su figura caminando diariamente por el centro de la ciudad.
Hito Nº 6 B
Av. Argentina y Roca.
Defensa de la democracia. Semana Santa de 1987.
Mayor Movilización Popular En Neuquén. Frente a la Municipalidad.
La marcha del domingo 19 de abril de 1987: la mayor movilización de Neuquén
El domingo 19 de abril de 1987 –domingo de Pascuas- una multitud jamás vista en la historia de la ciudad se movilizó al monumento al General San Martín para defender la democracia. Participaron de la marcha 40.000 personas en una ciudad de poco más de 150.000 habitantes.
Por la mañana comenzaron a llegar al Monumento columnas de manifestantes de los barrios, de los locales partidarios, de la universidad, de cada casa, y las calles de nuestra ciudad se fueron llenando de pueblo portando banderas argentinas, pancartas y carteles; la llegada de cada delegación era recibida por aplausos y un incesante batir de bombos y redoblantes.
La multitud conmovía por sus dimensiones, por su fuerza, su entusiasmo… cantando las consignas “El pueblo unido jamás será vencido” y “Olé, olé, olé, olá. Si este no es el pueblo, el pueblo dónde está”. Allí estaban la mujer y el hombre de barrio con los del centro, los trabajadores con los estudiantes, los viejos pobladores con los jóvenes, los niños y las niñas con los jubilados. Todo el pueblo en la decisión inquebrantable de defender la democracia la vida y la libertad.
Gran parte de la movilización permaneció en las inmediaciones de la Casa de Gobierno. Por la tarde, luego de escuchar el mensaje presidencial, marcharon nuevamente a la esquina de la Municipalidad. Desde el balcón del primer piso, don Felipe junto a don Jaime –que después de años distanciados volvieron a coincidir encabezando la defensa democrática del pueblo de Neuquén-, y otros dirigentes políticos leyeron un documento que decía entre otros aspectos:
“Este ejemplo que el pueblo nos ha dado, sin sectarismos, sin egoísmos, sin otro objetivo que la defensa de la democracia y la soberanía popular, hace que los dirigentes políticos asumamos un baño de humildad y reconocimiento ante la magnificencia del gesto”.
1987
