En el ingreso de la Municipalidad de Neuquén una placa recuerda a Soraya Álvarez, la primera trabajadora trans que formó parte de la planta permanente del municipio. La fecha elegida no es casual: este 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
En esta jornada de lucha y reivindicación por los derechos de la mujer los recuerdos sobre Soraya sobrevolaron la mesa que reunió a quienes la conocieron, “fue una líder y referente barrial”, “una trabajadora que buscó visibilizar nuestros derechos”, “fue una gran amiga y buena persona”, confiaron los más cercanos.
La vida de Soraya no fue fácil, sin embargo representa un ejemplo y la posibilidad de ser reconocidas, de tener trabajo en blanco y atención integral de la salud para el colectivo travesti, trans y transgénero de Neuquén.
La secretaria de Ciudadanía, Luciana De Giovanetti, junto con la presidenta del Concejo Deliberante, Claudia Argumero, convocó al homenaje al que no faltó ninguna. “Plantar la semilla para que florezcan libertades en memoria de Soraya Álvarez, primera trabajadora municipal trans”, dice la placa en su memoria.
“Representa un reconocimiento del Estado hacia nuestra población”, conceptualizó al reconocimiento Victoria Arriagada, de la Asociación Civil Trans de Neuquén. “Soraya fue la primera mujer trans que el Estado reconoce como trabajadora legal, al margen de que, como siempre digo, no haya podido acceder a la jubilación logró una previsión social hasta su muerte, lo que no tenemos la mayoría nosotras”, explicó.
Tatiana Antonella Breve es referente de la Red Nacional de Travestis Transexuales y Transgéneros de Argentina- ATTTA. “Venimos a colocar una placa en memoria de Soraya Álvarez, quien fue no solo la primera trabajadora de la Municipalidad sino también una líder y una referente barrial y de nuestro colectivo en particular”.
“Como organización de la sociedad civil venimos trabajando y tratando de que se ponga en valor nuestras vivencias y trayectorias y empezar a construir sociedades donde no quede nadie afuera”, dijo.
“Reconocer la memoria trans es construir la historia de una ciudadanía, de una ciudad, por eso celebramos la decisión política de Luciana De Giovanetti de colocar esta placa un 25 de noviembre por lo que representa la violencia machista y la lucha para combatirla. Agradecemos también a Claudia Argumero, presidenta del Deliberante, quien nos instó a acompañar esta ordenanza”.
Quien fue amiga entrañable de Soraya fue Luján Acuña, referente de la vejez trans: “Celebro que por primera vez reconozcamos en esta sociedad que existimos las mujeres trans adultas. Este es el inicio de una carpeta de trabajo para el año venidero con el compromiso de nuestras funcionarias, y va a ser de relevancia para mejorar la calidad de vida de esta población vulnerada”.
“Esto es un logro que hay que agradecer a nuestras funcionarias por habernos permitido este reconocimiento, es la presencia de las mujeres trans, adultas en un Estado que por años no nos reconoció, es el inicio –insistió- de una nueva era para nuestra vejez”.
Escuchar audio. Luján Acuña, referente de la vejez trans.
Escuchar audio. Victoria Arriagada, representante de la Asociación Civil Trans de Neuquén.
Escuchar audio. Tatiana Antonella, referente de la Red Nacional de Travestis Transexuales y Transgéneros de Argentina- ATTTA.