En los hornos pirolíticos del Cementerio Central se destruyeron esta mañana 80 kilos de estupefacientes a pedido de la Justicia Federal de Neuquén. Este es el cuarto operativo que se realiza en lo que va del año con la quema de 250 kilos en total de droga ilegal secuestrada en diferentes procedimientos efectuados en esta provincia y en la de Río Negro.
A las 8 y en el marco de fuertes medidas de seguridad, las sustancias fueron pesadas y discriminadas por tipo -en este caso se trató de marihuana y de cocaína- y luego introducidas para su incineración en los hornos de la necrópolis ubicada en Córdoba y Teniente Ibañez. Todo el procedimiento fue filmado y documentado con imágenes fotográficas.
La subsecretaria de Servicios Ambientales, Paola Guerrero, precisó que los narcóticos destruidos “son los mismos que los incautados en los últimos meses en procedimientos llevados a cabo por la Justicia de Neuquén”.
“Es frecuente que los juzgados de Roca y de Neuquén como los Tribunales Federales de ambas provincias soliciten nuestra colaboración mediante el uso de estos hornos, ya que se logra de destrucción total de la droga sin generar ningún tipo de perjuicio al ambiente y a la salud”, agregó.
El último operativo se efectuó en marzo y este, que duró alrededor de dos horas, fue hecho a solicitud del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 2 de la ciudad.