En un operativo conjunto entre la Municipalidad, a través de la subsecretaría de Medio Ambiente y Protección Ciudadana, y la Policía de la Provincia fue desbaratada anoche una fiesta privada en el barrio Santa Genoveva, que culminó con siete demorados. Los asistentes fueron puestos a disposición de la Justicia por violar la cuarentena, y además se secuestraron los vehículos de dos conductores que dieron positivo al test de alcoholemia.
Al momento del despliegue del importante operativo, que comenzó a las 23 y culminó en la madrugada de hoy, iban llegando al lugar más jóvenes para participar del encuentro ilegal.
“Se proyectaba como un evento masivo, de grandes proporciones, que pudo ser contenido a tiempo y que de lo contrario podría haber tenido consecuencias impensables si entre los participantes hubiese algún contagiado de coronavirus”, mencionó el subsecretario municipal, Francisco Baggio.
informó que entre los detenidos “hay menores de 16 años. La fiesta privada se hacía en una casa de alquiler ubicada en la calle Río Juramento al 900” y contó que uno de los jóvenes intentó escapar por los techos, pero los efectivos policiales contuvieron la situación y demoraron a todos los que se encontraban dentro del inmueble.
Dijo que por otra parte, desde el área de Comercio Municipal “se está indagando si la casa de fiestas cuenta con habilitación para eventos dado que en este sector de la ciudad estaría prohibido”.
“Lo sucedido es un delito grave enmarcado en la violación de la cuarentena, por lo cual interviene la Justicia”, ratificó Baggio al referirse a los demorados que tienen entre 16 y 25 años de edad.
“Nos convocó la Policía, que tuvo que distraerse de sus funciones de control y verificación de permiso de circulación de la ciudad para atender esta situación que termina con 7 demorados, con dos autos secuestrados y dos alcoholemias positivas en un procedimiento del que participó Tránsito Municipal y que nos demandó hasta las tres de la madrugada”, puntualizó.
“Por suerte pudimos frenar este evento a tiempo, porque iba llegando más gente”, insistió el funcionario, indicando que el operativo tuvo origen en quejas por ruidos molestos por parte de vecinos de la casa donde se hacía la fiesta clandestina.
convocó a la reflexión: “Estamos en emergencia sanitaria, burlaron el periodo de aislamiento preventivo, social y obligatorio. Es gravísimo lo ocurrido, por eso convocamos a ser responsables, a seguir esforzándonos, a cuidar de nosotros y de los otros para prevenir la propagación del contagio del COVID-19 en nuestra ciudad”.