La subsecretaría de Derechos Humanos y Sociales de la Municipalidad y la subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia provincial mantuvieron un primer encuentro con el objetivo de elaborar un protocolo único de intervención para el refugio ubicado en la capital destinado a dar contención a menores en situación de riesgo.
Con este objetivo, se concretó un encuentro entre la titular de la subsecretaría del municipio, Victoria López, y su par provincial, Encarnación Lozano. Se trata de la segunda reunión tras la asunción en funciones de ambas (la primera por el motivo en cuestión), y en el cónclave se acordó que el próximo 5 de enero ambas partes presentarían un borrador para tratar de consensuar un convenio marco definitivo.
“Es un protocolo de acción que determina el tipo de actuaciones que tendrá cada una de las partes”, informó López.
La subsecretaria recordó que tanto el municipio como la provincia deben designar a los integrantes de una comisión que supervisará la aplicación del protocolo de funcionamiento, una vez que se haya elaborado la versión definitiva. Este ámbito estará integrado por un representante por cada uno de los gobiernos.
Tal como funciona ahora, la Municipalidad aporta el alquiler y el mantenimiento del inmueble ubicado en calle Rivadavia 828, que cumple las funciones de refugio nocturno y centro de día.
En tanto, el ministerio de Desarrollo Social aporta parte de los bienes para el equipamiento del refugio, además del recurso humano (profesionales y operadores) necesario para el funcionamiento.
Al refugio concurren niños en situación de riesgo detectados por los operadores provinciales. El objetivo es garantizar las condiciones que permitan sacarlos de la calle, en un trabajo en conjunto con sus núcleos familiares, tratando de ofrecer el marco de garantías a las que por cuestiones sociales y económicas no pueden acceder.