La dirección de Niñez y Adolescencia, dependiente de la subsecretaría de Derechos Humanos, realizó hoy la segunda reunión en el barrio Confluencia en el marco del programa Prevenir, que instaurará una experiencia piloto en ese sector de la ciudad y, hacia el otro extremo en, Almafuerte II.
El encuentro de esta mañana se realizó en el Centro Comunitario Infotecnológico del barrio, y participaron, además del director de Niñez y Adolescencia, Alejandro Carnevale, representantes del sistema público de salud, de la comisión vecinal, del ámbito deportivo, bibliotecas, asistentes sociales, policía, y referentes del barrio Confluencia.
En esta instancia, recibieron una capacitación con el objetivo de contar con herramientas que les permitan disminuir los riesgos y el impacto de las drogas entre las personas que ya están afectadas por una adicción.
El hecho de que se haya elegido a estos dos barrios de la ciudad para iniciar la experiencia guarda relación con datos de la subsecretaría de Salud, que acreditó que se trata de dos puntos poblacionales con índices preocupantes en materia de adicciones.
“Lo que se busca ahora es que cada una de las personas que estuvo en las capacitaciones, actúe de propagador de los conocimientos impartidos en la capacitación”, planteó Jésica Martini, integrante del equipo de la Dirección de Niñez.
En una próxima etapa, los líderes barriales serán el nexo, en buena medida, con la población afectada por las adicciones, y en conjunto, ya que el programa se aplica en la órbita comunitaria, se determinarán lineamientos que permitan ofrecer alguna alternativa para contrarrestar como impactan las adicciones en estos barrios. Es decir, es una construcción que se hace desde el barrio , con capacitaciones y apoyo de especialistas, para los problemas de adicciones del barrio.