Ésta área natural protegida permite disfrutar de las costas de nuestro río Neuquén y su vegetación frondosa con senderos habilitados para caminatas y paseos en bicicleta, con más de 4 km de recorrido que presentan baja dificultad.
Es un espacio recomendado para quienes se animen a adentrarse desde la zona árida de las bardas neuquinas a un área de vegetación ribereña y conocer otro de los ambientes de nuestra zona, contrastante y complementario a la vez.
Descubrí gran cantidad de avifauna para avistar, como cisnes, patos, garzas, entre distintas especies de flora introducidas como el sauce blanco, sauce mimbre, falsa acacia, tamariscos, olmos, álamo negro y blanco, macizos de olivillo, fresnos, acer negundo y eucaliptos. También vas a poder observar plantas trepadoras, como madreselva, cada tanto algunas mburucuyá y parras. Suele haber arbustos como rosa mosqueta, la chilca, bardana y cardos.
Normativa de creación:
Ordenanza Nº 14147
En este link podrás consultar las normativas de referencia.