Mi propuesta quiere demostrar como algunas industrias nos impiden garantizar estos derechos, alterando nuestros suelos, el agua y nuestros alimentos a costa de un negocio que solo beneficia a algunos pocos. Perjudicando las cosechas regionales, la salud de la población aledaña y apropiándose de gran parte del suministro de agua en plena emergencia hídrica, además de contaminarla. Mi propuesta nace de tener estas problemáticas presentes, actuar de alguna manera y no ser indiferente a lo que sucede.